Arpegios.
Una complicada combinación de notas que hacen falta para que tu voz suene junto a la mía.
Un sofisticado conjunto de actitudes y aptitudes. Un color para el que hace falta mezclar mil paletas de millones de tonos.
Y sin embargo, yo te miro ir y venir como una luz que implica fisuras.
Vos no querés saber nada a veces con mis creencias. Y otras confiás en mis angustias más que yo. Nadie ha creído más en mí que vos. Y nadie ha creído más en vos que yo.
Pero sin embargo inventamos un ajedrez de dudas, y de controversias.
Mientras yo me imagino reptando por tu piel ahogando el sufrimiento de la espera, vos te imaginás escuchándonos hablar, conociendo los pliegues de nuestras mentes.
Y para los dos es sumamente excitante. Portentoso.
Tejo una manta de papel con los besos que me pide el alma. La mojo con tus lágrimas y se desarma. Se deshace como una gota de sangre en el agua.
Y me siento a esperar el eco de tu voz, o el rastro de tus palabras sobre el fondo blanco de mis demoras.
Llegados al punto del deseo, me protejo de tus adjetivos, poniendo por delante verbos que se hacen fuertes y pesan. Y hago fuerza para sostenerlos. Y puedo hacerlo. Aprieto fuerte mi escudo de verbos no concretados, o no creídos. Y lo empujo.
Por detrás de mis palabras está el Castillo del Silencio, adonde estuve hace muy poco, y me preparo para subir la cuesta del pesar.
Será difícil, pero habida cuenta de mi actual debilidad, sé que podré recuperar lo perdido. El tiempo perdido, el deseo perdido, las noches perdidas.
Mientras tanto me pedís una Verdad. Una así de grande. Yo comienzo a dártela, como si me deshojara. Como si me partiera en pedazos.
Un sofisticado conjunto de actitudes y aptitudes. Un color para el que hace falta mezclar mil paletas de millones de tonos.
Y sin embargo, yo te miro ir y venir como una luz que implica fisuras.
Vos no querés saber nada a veces con mis creencias. Y otras confiás en mis angustias más que yo. Nadie ha creído más en mí que vos. Y nadie ha creído más en vos que yo.
Pero sin embargo inventamos un ajedrez de dudas, y de controversias.
Mientras yo me imagino reptando por tu piel ahogando el sufrimiento de la espera, vos te imaginás escuchándonos hablar, conociendo los pliegues de nuestras mentes.
Y para los dos es sumamente excitante. Portentoso.
Y mientras vos dudás entre despertar a la verdad o dejarla dormir, yo me deshojo. Me desarmo lentamente. Me despego la cáscara, y camino entre tinieblas . Me quito la piel a trozos, y voy mostrando mis miserias más profundas. Y vos las curás con el más leve roce de tus manos.
Tejo una manta de papel con los besos que me pide el alma. La mojo con tus lágrimas y se desarma. Se deshace como una gota de sangre en el agua.
Y me siento a esperar el eco de tu voz, o el rastro de tus palabras sobre el fondo blanco de mis demoras.
Llegados al punto del deseo, me protejo de tus adjetivos, poniendo por delante verbos que se hacen fuertes y pesan. Y hago fuerza para sostenerlos. Y puedo hacerlo. Aprieto fuerte mi escudo de verbos no concretados, o no creídos. Y lo empujo.
Por detrás de mis palabras está el Castillo del Silencio, adonde estuve hace muy poco, y me preparo para subir la cuesta del pesar.
Será difícil, pero habida cuenta de mi actual debilidad, sé que podré recuperar lo perdido. El tiempo perdido, el deseo perdido, las noches perdidas.
Mientras tanto me pedís una Verdad. Una así de grande. Yo comienzo a dártela, como si me deshojara. Como si me partiera en pedazos.
Foto: La que en mis ideas es la puerta al Castillo Del Silencio, en algún lugar cerca del Mediterráneo.
14 murmullo(s):
es la entrada al castillo de la espera, en algun lugar de la conca...
¡Qué belleza de blog nuevo!
¡Qué linda imagen "gandalfiana" y "merlinesca" la de la cabecera!
Y encima el verde, mi color preferido, coloreando tus palabras...
Y qué decir de la imagen de esta entrada y de su escrito.
Bienvenido y feliz renovación.
Besos sabor a verde menta fresca
Me gusta más este nuevo look!
Este post me hace pensar en un desencuentro vital...de esos que no acaban de dejar que la puerta se cierre
¿Una verdad?
Quien quiere una verdad habiendo maravillosas mentiras.
La imagen que ilustra el post es una preciosidad y el nuevo look de tu blog emana frecura.
Besos,
Nuevos colores para una vieja música.
Un placer leerte de nuevo, my friend.
Portentoso. Eso es.
Gracias por tus palabras!!!
Me encanto, no tengo palabras para lo que has escrito. Felicitaciones!
Un abrazo.
muy buen post.
besos perfumados
ya entendi pq te sorprendistes con lo de mis mormullos, pero he de confesarte q mas me he sorprendido yo al leer tu blog, siendo hombre y la sensibilidad q leo en tus palabras, impresionante.
saludos seguire leyendote
entiendo que tu liberas tus miserias, pero
y si alguien entra y las toma
y las remueve
y te quedas atónito al ver cuánto poder tiene sobre ti??. te quedas atónito al ver qué tan frágil eres??
aah... supongo que para eso tengo
mi pequeño castillo.
para que nadie alcanse mis miserias...
para que nadie pueda convertirse
en alguien indispensable.
PD: qué agradable fue leerte!
Saludos.
Es la primera vez que leo tus palabras. Palabras tan llenas de intimidad transparente, de una intensidad a ratitos contenida. De emoción, de mucha emoción.
Gracias por tu visita a mi blog y gracias por el desglose casi perfecto de tu interior.
Un saludo
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