‘Sangrientas son sus palabras / y su sonrisa fatal; / sangrienta, el agua que bebe; / sangriento, todo manjar’ (L. Lugones) -
Una abstrusa pasión, destando graves soliloquios. Ultradelgados dedos rascan el dolor. Agregan lentes deformes, y apuran el sabor de tu piel, la noche sosegada, las lentas palabras que balbuceo. Respeto tu falta de respeto, tu mirada baja. Siendo franco, la noche no es necesaria para escondernos a oscuras. Para desatarnos.
Mientras tus dedos carenan mis rodillas, para protegerlas del resto del universo extraigo el sabor de tus pechos infinitoss para quedármelo para siempre. Para repantigar tus dedos en la almohada.
Pasan los segundos, los nanominutos, las respiraciones. Y la conexión es rutilante. No hace falta imaginar las miradas, porque no llegaríamos a mirarnos. Chocamos, colisionamos, sin dejar de sentir.
Rehúso toda clase de otro pensamiento, plantearme nada. Sólo quiero dejarme llevar.
Mañana.
El salobre infiltrado cielo de tus codos. El ancho peso de tus clavículas. El deseo inesperadamente previsible. La noche insulsa se vuelve sabrosa. Pestilente. Se vuelve melosa, atacada de influidez.
Compatibilizando voces y bocas, manos y dedos, cuerpos y mentes.
Escarpias exóticas. Lazos de angustia. Espacios empotrados en carne. Fluyen las aguas y nada importa, nadie interesa. Esconden las particulares luces. Hay una alcantarilla donde desaguan mis intenciones, tus pechos. Está donde se unen tus piernas. Pero recorren un camino zigzagueante y curioso. Mencionan tu nombre a veces, y otras callan por ser lo más conveniente.
Calculo los milímetros que nos separan y no presiento otra cosa que un mantra enrevesado. Escuecen las carnes, la yema de los dedos. Estaciono mi mente por un rato.
Pero vuelve a ponerse en marcha, a reblandecer ese deseo que creía congelado. A esconder la minuciosa delgadez de la resistencia.
Hacemos planes. Juntos.
Mañana.
Mañana será otro día.
Pasan los segundos, los nanominutos, las respiraciones. Y la conexión es rutilante. No hace falta imaginar las miradas, porque no llegaríamos a mirarnos. Chocamos, colisionamos, sin dejar de sentir.
Rehúso toda clase de otro pensamiento, plantearme nada. Sólo quiero dejarme llevar.
Mañana.
El salobre infiltrado cielo de tus codos. El ancho peso de tus clavículas. El deseo inesperadamente previsible. La noche insulsa se vuelve sabrosa. Pestilente. Se vuelve melosa, atacada de influidez.
Compatibilizando voces y bocas, manos y dedos, cuerpos y mentes.
Escarpias exóticas. Lazos de angustia. Espacios empotrados en carne. Fluyen las aguas y nada importa, nadie interesa. Esconden las particulares luces. Hay una alcantarilla donde desaguan mis intenciones, tus pechos. Está donde se unen tus piernas. Pero recorren un camino zigzagueante y curioso. Mencionan tu nombre a veces, y otras callan por ser lo más conveniente.
Calculo los milímetros que nos separan y no presiento otra cosa que un mantra enrevesado. Escuecen las carnes, la yema de los dedos. Estaciono mi mente por un rato.
Pero vuelve a ponerse en marcha, a reblandecer ese deseo que creía congelado. A esconder la minuciosa delgadez de la resistencia.
Hacemos planes. Juntos.
Mañana.
Mañana será otro día.
Elipsis. Es la omisión de palabras no necesarias para el sentido.
Imagen: De lo erótico, de mi amiga Julieta Magenta
Imagen: De lo erótico, de mi amiga Julieta Magenta
10 murmullo(s):
Muy sugestivo tu post.... y un hermoso Blog realmente... me gusto
Un abrazo Para ti
que tengas un Buen dia!!!
Mariajose
Recuerda que [-] es [+]
www.mariajose81.blogspot.com
me gusta tu blog, y este post es genial, me gusta mucho la frase del principio, lo de "‘Sangrientas son sus palabras y su sonrisa fatal;sangrienta,el agua que bebe;sangriento, todo manjar’, bueno, y todo el post..es genial!
me gusta tu blog, y este post es muy guay! me gusta mucho al frase del proncipio, "Sangrientas son sus palabras y su sonrisa fatal;sangrienta el agua que bebe;sangriento todo manjar"
Muy guay!
lo más terrible de tus palabras es que siempre me hacen recordar historias que estaban casi sepultadas.
Es muy sugerente.
Lo que más me gusta es que no me ha bastado la primera lectura. Los ojos me piden una segunda para atar cabos. Y se la daré, gustoso...
Hola hola! esas palabras llegan, me gustan, mucho!
seguire viendo tu espacio....
cariños...
Hola Andy,
Estoy de acuerdo con los comentarios anteriores en que las palabras del inicio de esta entrada lo dicen todo. Realmente bello, me gustó mucho.
Gracias por haber dejado un comentario en mi blog y creeme que yo también deseo que me despierten cuando termine octubre, o si es posible hasta después de navidad... octubre es el peor mes para mí :(
si no es indiscreción ¿por qué quieres despertar hasta mediados de noviembre?
Besos chilangos
Poco necesita el deseo para despertar. A veces, a pena suna mirada, un roce, una plabra justa y preciosa...
Gracias por tu visita.
Un abrazo
ja..el chocar..el colisionar..el estrellarse contra el otro..puede decir mucho mas que una mirada.
Me gusto bastante el texto ^^
Saludos
hermoso y muy sensual.
Publicar un comentario