ALFA: EL CAOS

sábado, junio 21

 


"(...) una masa bastante cruda e indigesta, un bulto sin vida, informe y sin bordes,
de semillas discordantes y justamente llamada Caos"
Ovidio, "las Metamorfosis", I, 7.


El caos. La no-oscuridad. La no-luz.
El encendido cósmico (Y cómico) de la leche de la vía láctea aún en off.


Dicen los etimologistas que el caos en griego es "lo impredecible".

Pero en realidad el Caos, posteriormente, en el lenguaje protoindoeuropeo, significó "hueco", "muy abierto". Y como los idiomas son una convención, y a veces las convenciones no llegan a buen puerto, el caos pasó a ser... el desorden.


El Caos es la complejidad de la causalidad. La génesis de un montón de eventos que se confabulan por alguna razon inexplicada y que tienen (tal vez) la capacidad de desencadenar una serie de acontecimientos más complejos.

El bendito efecto mariposa.

¿Y por qué se llama efecto mariposa? Bueno, Ray Bradbury escribió a mediados del siglo pasado un cuento que se llamó "A sound of thunder".

En ese cuento, dos amigos consiguen viajar en el tiempo. En un momento dado ellos matan a un insecto. Y cuando regresan a su tiempo se dan cuenta de que el mundo es sensiblemente diferente al que conocían.
Ese pequeño cambio había sido suficiente para cambiar el universo.
Les pido que recuerden esto: un mínimo cambio suficiente para cambiar el universo conocido.


El bicho era una mariposa.

Una mariposa surgida del Caos, que era el espacio abierto, la pura extensión ilimitada, el abismo.

Súbitamente, del Caos surgió la primera realidad sólida: Gea, la Tierra.

Fue ella quien dio un sentido y un orden al Caos, al limitarlo, e instaló en él el suelo, escenario de la vida.


El Caos era la primera figura de la creación. El que salió de la nada. Y junto a Nix, Érebo y Tártaro fueron la delantera del primer equipo de deidades.


Las tradiciones órficas eran más optimistas, veían el origen de todo en la noche, en Nix. Aristófanes, en su obra los Pájaros, los representaba de este modo, como aves que copulaban y engendraban nuevos dioses.


Los asirios representaban el Caos a través de un dragón de cuerpo desmembrado llamado Tiamat, a partir de cuyos trozos se formó el universo conocido.


Pero a mí me gusta pensar en esa leyenda tal vez no tan conocida.

Dice así: se cuenta que en el inmenso Caos vivía, solitaria y poderosa, la bella diosa Eurínome. Le gustaba mucho bailar, pero no tenía dónde... vivía en la Nada.

Es jodido querer bailar y no tener nada sólido donde apoyar los pies.

Entonces separó el mar del cielo con un tarugo cósmico. Y empezó a saltar, feliz, sobre esas olas. Fue la primera transformación del caos.
Al bailar tanto y tan bien, uno ya sabe, se le empiezan a arrimar curiosos.

El primero que se acercó fue el viento norte. Y la sacó a bailar.

Eurínome abrazó a su fluido compañero y, con manos nerviosas, lo restregó incansablemente, hasta que lo tornó sólido.


Como el universo de esta diosa sólo estaba compuesto por olas y por pasos de baile, naturalmente convirtió el viento en una inmensa onda.

Una serpiente. Ella le puso de nombre Ofión. De ahí la denominación de las serpientes como ofidios.

Ofión se tendió a sus pies y la vio bailar. Y se enamoró de ella. Y mientras la rodeaba con su cuerpo, no pensaron en nada más; y todo volvió a ser caos por un rato. Y la amó, haciéndola engendrar todas las cosas que existen en el mundo.

¿Y qué es el amor más que la degradación de Caos? El poner en orden las piezas sin dejar de ser vulnerables al desamor... el sentir que has llegado a alguna parte aunque no dejes de andar. El estar feliz sólo por el hecho de recibir un beso, de sentirse deseado, de tomar una sopa caliente, de sentirse buscado, y dejarse encontrar.


El Caos, hoy puede ser la vida de cualquiera de nosotros. Algo que surge de la nada, y nos desconcierta. La mentalidad herrumbrosa que nos impide dejar atrás el dolor, la culpa, la anhedonia.

No podemos evitarlo. Es imposible.

Por lo tanto, debemos vivir con eso, manejarlo.
El amor no es lo opuesto al Caos. Para nada. El amor es Caos, es desorden, es pérdida del sentido de las prioridades, es terror a perderla, o perderlo; es esa incertidumbre de no saber por qué te han elegido; es esa sensación de no saber si estás haciendo lo correcto, o si estamos dándonos en exceso o siendo avaros con nuestros sentimientos.

Eso es el amor, amigos. Es astucia e idiotez; es insensibilidad y generosidad; es un golpe en plena cara, y una caricia en el pelo. Es querer ser mejor. Es Querer Ser.

El Caos es doloroso, e implacable.

Es como una máquina de esas que están arreglando algo ahí afuera, y que te lobotomiza, y no podemos hacer nada para detenerla. Pero en algún momento el operario se cansa, o llega la hora de comer, o simplemente el trabajo está hecho. Y el sonido se detiene. Y llega la paz, como suele pasar. Eventualmente la molestia acaba.
Y uno, no sé si por masoquista o por simplemente ser humano, echa de menos ese ruido de mierda. Hasta que lo supera. Pero nunca lo olvida.

El Caos es doloroso, e implacable.


Pero, en realidad, el origen de todo lo bello está en el Caos. En esa mezcolanza ("mezcolanza", brumosa y bella palabra) de sensaciones, sentimientos, emociones y prohibiciones que dejan que surja algo nuevo.

Hoy mismo, quien suscribe, ve el Caos con sus propios ojos. Y le fascina verlo.

Observarlo de frente y comprender que esa impredecible mixtura de sensaciones puede engendrar algo tan maravilloso como unos ojos que te miran en un momento en que deseás ser mirado, algo tan nefasto como la imposibilidad de dejarse llevar por la felicidad, algo tan delicioso como recordar en cualquier momento y en cualquier lugar que a ella no le gusta quitarse los calcetines para hacer el amor, o que es impulsiva, peligrosa y atrevida. Algo tan insignificante como aquello que dijiste hace semanas y es recordado por el otro. Algo tan doloroso como saber que no se puede estar juntos simplemente "porque no se puede". Al menos hoy.


En fin, el Caos es lisa y llanamente la posibilidad de desdoblarse, y de bailar en la nada. De resistirse a la espantosa sensación de no ir a ninguna parte.

El Caos es, y a vos te estoy hablando esta vez. Sí, a vos:

El Caos es la razón por la que te he elegido. Y vamos a salir de él.


Y por supuesto, será bailando.



Imagen: Vista de la costa de Preveli, en Rethymnos, Creta,
en el principio del verano del 2007 (bah, hace un año)

13 murmullo(s):

Sasian dijo...

aprender a manejar el caos del amor?. Me gusta.
El amor tiene que ser desordenado, caótico, sin sentido... es porque si... y cuando el ruido cesa y por puro hueco lo echamos de menos, solo nos queda dejarlo en el recuerdo y buscar un caos nuevo.

Me encanta escuchar tus murmullos.

Un abrazo descuidado y caótico

Steki dijo...

Andrés:
Vos sos agente de Caos?
Ups! Perdón, me salió del alma.
La verdad es que te agradezco que nos cuentes tantas cosas de la mitología, es fascinante.
Rescato a la bella diosa Eurinome.
Me siento identificada con su baile.
Aunque yo hubiera bailado flotando en la nada.
Y aunque odio los reptiles hubiera bailado con Ofión y me hubiera dejado amar.
Claro que en nuestras vidas siempre habrá Caos pero también saldrá la luz, el encendido cósmico.
Yo transité por el Caos.
Ahora espero se haga la luz.
Mientras tanto... sigo bailando.
Excelente post!
BACI, STEKI.

Steki dijo...

Perdón, olvidé algo.
Puedo pasar a darme un chapuzón?
Ese mar azul invita.
Grecia me espera.

Sibyla dijo...

Pues sí salgamos de este dichoso Caos!!!!

Saludos:)

DudaDesnuda dijo...

En algún punto del post se pregunta que es el amor. Una estafa. Una pérdida de tiempo. Un dolor de ovarios, eso es el puto amor.

Besos destruídos.

Andrés dijo...

¿Sabés qué, Duda?

Tenés toda la puta razón.

Gracias por pasar.

La sonrisa de Hiperion dijo...

El caos es la sal de la vida.
Saludos

Anabella dijo...

Nada mas lindo que ese puto dolor cuando es compartido, cuando la estafa es mutua, cuando la extorision es complicidad, cuando el dolor de lo que sea viene amarrado de pasion... Si asi que VIVA el PUTO DOLOR del AMOR en Donde SEa pero SIEMPRE con el SER INDICADO!!!!

LUCIA-M dijo...

Uff, el "Amor" en este momento para mi Dolor.
Muy buen post,
besos.

Claudia Sánchez dijo...

Lo impredecible, puede suceder en cualquier momento, y producir un hueco tan profundo que no haga más que pronunciar el desorden y complejidad de la causalidad.
Por ejemplo, que mates a una oruga antes de que ésta se convierta en mariposa, y este evento trastoque absolutamente todo el universo tal como lo conocemos.
Lo cual no impide que existan otros universos, conocidos o por conocer.
Solo debemos cuidarnos de no matar a las orugas.

mariapán dijo...

Qué interesante me parece tu blog...cada vez que entro tengo que quedarme un rato asimiliando toda la información que das y admirando la forma tan perfecta en que la das...Gracias
Un saludo

Espacio Muladhara dijo...

Hesíodo dice: "Antes que todas las cosas fue Caos;y después Gea la de amplio seno,asiento sólido de todos los Inmortales que habitan las cumbres del nevado Olimpo y el Tártaro sombrío enclavado en las profundidades de la tierra espaciosa; y después Eros, el más hermoso entre los Dioses Inmortales, que rompe las fuerzas, y que de todos los Dioses y de todos los hombres domeña la inteligencia y la sabiduría en sus pechos".
Es más interesante pensar que provenimos del caos y no ex nihilo.El caos es productivo, contiene en sí a todo. Sólo hace falta un demiurgo que se atreva a ordenarlo, porque eso es el cosmos: el orden. Alabo el desorden porque incita al movimiento.Como Eros.
Para Platón,Eros es el hijo de Poros -el Recurso- y de Penía -La Pobreza-. "En primer lugar,es siempre pobre,y lejos de ser delicado y bello,como cree la mayoría,es, más bien, duro y seco, descalzo y sin casa,duerme siempre en el suelo y descubierto, se acuesta a la intemperie en las puertas y al borde de los caminos,compañero siempre inseparable de la indigencia por tener la naturaleza de su madre. Pero, por otra parte,de acuerdo a la naturaleza del padre, está al acecho de lo bello y de lo bueno; es valiente,audaz y activo,hábil cazador,siempre urdiendo alguna trama,ávido de sabiduría y rico en recursos,un amante del conocimiento a lo largo de toda su vida,un formidable mago,hechicero y sofista." (podría seguir,pero remito al discurso de Sócrates en El Banquete). Así Eros, que reúne en sí a los contrarios -como escribiera Quevedo en uno de sus sonetos amorosos-,nos toma por sorpresa y nos agita hasta la última célula.
Eros se parece a Caos. Todo es desorden.Todo es semilla.No sé si del caos se sale bailando. Algunos entramos y salimos con la literatura.
Gracias por los comentarios en Soy yegua,allí los respondí

karina Androvich dijo...

NOOOOOOOOO!!!!!!!!!!!
Esto es genial, no quiero ser hincha pelota, pero creo que ya lo fui, en fin...
Disculpas Andres, es que es mi día libre y estuve sentada a la compu full time.
Es genial descubrir todo esto que decis del caos y sobre todo tu versión me parece tan encantadora que no sabría con qué compararla.

Mil besos y caos

Karina