X.- PERFUMES

viernes, mayo 9

 



Me dejaste un aroma a almendras. Te dejé mi aroma de siempre.



Acaeció



Hubo que superarlo. Atravesar las alambradas del miedo y las infancias, y las caminatas, y las opulencias, y los macabros pecados. Saltamos limpiamente.



Ocurrió.



No lo hicimos, simplemente aconteció. Como el amanecer en el desierto de Gobi. O como la sombra en la Cibeles.



Ambos supimos que el momento era ése. No otro. Ni mañana, ni hace nueve días y treinta y seis minutos. Ni hace tres años, cinco meses, dieciséis días, ocho horas y once minutos.



Sobrevino.



Aprendimos. Summa cum laude. Pero sin alabanzas.



Fue natural, preciso, milimétrico. El acoplarse y pensar sin pensar en lo que el otro pensaba.



Se produjo.



Fue quirúrgico. El hollar una tierra extraña y descubrir un planeta apto para la vida. Te pusiste triste, pero sólo fue un breve eclipse. Como cuando te inquietás cuando se corta la luz, pero vuelve de inmediato. Y volvió la luz, la electricidad, una descarga a alta potencia.



Te pedí que lo dejaras en mis manos. Las mismas que te han tocado, apenas, ávidas de tu contacto. Y por primera vez en años, en siglos, en eones, sé que hacer con lo que tengo entre manos.



Sin embargo, volvimos a la normalidad, si es que existe algo normal en todo esto.



Ocurrió.



Y vos ahora estás tan lejos y acá; yo fumo y te pienso.



Y mientras vos te vas a alguna parte a mostrar quién sos, a mí la sonrisa se me incrusta como atornillada.



Me duele el brazo de tanto pellizcarme.



Pero vos vas y me decís... "acá estoy".



Entonces ya sé que no será un sueño.

6 murmullo(s):

Poledra dijo...

:-) nes bonito vivir cosas así.

Me alegro.

Ya lo sabes,no es un sueño, no te pellizques mas.

Un abarzo

Anabella dijo...

IVamos por el X, sucesiones que en verdad te transportan a la escena vivida, marcada y señalada...

Fusiones de Aquellas

Anabella dijo...

Cuantos semáforos que tendría entre texto y texto....
Cuantos Vuelos...con dos pares de alas haciéndose una....

Anónimo dijo...

No sé como he llegado hasta tus murmullos, pero son increíbles. Me encanta la magia de internet, que de vez en cuando me da sorpresas tan agradables como encontrarme con textos como los tuyos, escribes genial!!
Además, ese acento argentino (porque es argentino, no?) me tiene ganada :)
Seguiré leyéndote, ha sido un placer encontrarte. Este último texto de los olores... simplemente genial!!
Besos

Anónimo dijo...

mmmmmmm en qué anda mi muchacho adorado?
sin palabras.
Me has traicionado.
Y yo te amo y te amaré y te esperaré bajo las lluvias o bajo los soles.

Mar y Sol(a veces tenue y otras no) dijo...

Bello, bello y bello.
Sólo eso para este relato en el que uno se siente parte de él tal vez por lo vivido...tal vez
Un beso!